“tranquila, estoy aquí, junto a ti…”.

Hay momentos en los que no podemos evitar mostrar nuestra complicidad, es intensa la necesidad de sentirte aunque tan solo sea un segundo… alimentar mi vida con tu gesto de “tranquila, estoy aquí, junto a ti…”. Te amo, no he estado tan segura de estas dos palabras en toda mi vida.
creo que en la vida, uno tiene que ser cómplice. individualmente se es cómplice con uno mismo cuando se está solo. cuando tiene pareja, la necesidad de saber que eres cómplice te hace sentir la vida. lloras, ríes, sufre, gozas, te enfadas, haces paces, . . y mas cosas. Si todo esto, se hace siendo cómplices el llanto, la risa . . son mas alegres.